Pensar que Rafa Nadal es de otro planeta es una tontería bastante grande, pero es que el manacorí nos da motivos para pensar en ello. Ayer volvió a enfrentarse a Federer y le volvió a ganar. El español ha vuelto a demostrar que si está en forma, es practicamente invencible sobre tierra batida.Rafa consiguió ayer el cuarto título consecutio en Montecarlo, el único en toda la historia en conseguirlo. Realmente algo increíble. La temporada de Nadal empieza ahora, con torneos en tierra batida preparando el asalto a su cuarto Roland Garros consecutivo.
Federer se vio superado ayer por un doble 7-5 y dejando escapar un 0-4 en el segundo set, que de haberlo ganado hubiera forzado el tercer set. La derrota son de las que hacen daño. El suizo sigue siendo número 1, no hay nadie que lo cuestione, pero no hay manera que le pueda ganar al español sobre tierra batida. Sobre hierba u otras superfícies es otro cantar. Para Federer su objetivo debe ser ganar, al fín, su primer Roland Garros, el único Grand Slam que le falta. Pero con Rafa en forma es tarea bastante difícil.
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